La resurrección de Lázaro
Alberga la escena del milagro de la Resurrección de Lázaro, también prevista en el Libro de los Misterios de Galeazzo Alessi (1565-1572). La capilla y el grupo estatuario se terminaron en 1583, presumiblemente junto con las pinturas, y fueron financiados con la ayuda del noble milanés Pomponio Bossi. Las esculturas se han atribuido a Bartolomeo Badarello de Campertogno. A petición del obispo Bascapè (1584), se añadieron dos esculturas más (a la izquierda), realizadas en la última década del siglo por Michele Prestinari, un estatuario de Como que también trabajó en la catedral de Milán. Los frescos se han dividido recientemente entre el pintor local Gian Giacomo Testa y un pintor manierista cercano a la época de madurez de Aurelio Luini. La figura original de Cristo fue reemplazada en 1905, debido al mal estado de conservación, por una nueva estatua de gusto neoclásico del escultor Carlo Vanelli.